domingo, 17 de enero de 2021

 Te quiero entre corales y mareas.

Te quiero en el silencio y la tristeza,
entre palomas blancas que deseas,
entre mi tierra oscura y su simpleza.

Semejantes a mares y desiertos
sellamos nuestro amor el que condena,
con ojos que temblando y ya despiertos
se posan misteriosos en mi pena.

Te quiero en el cristal de mi ventana,
en la copa de un vino yo te quiero
llena de sol y viento en la mañana,
para decirte, amor ¡Por ti me muero!

¡¡ TE QUIERO ENTRE CORALES Y MAREAS!!

 

¡¡LOS ROSALES!!

Si el canto de la lluvia mojando los rosales
me devolvieran la esperanza en mis saudades
vería mis entrañas las señales de que estoy
aquí, prendada de ansiedades.

Si esos rosales salpicaran mi rostro
cautivos mis ensueños corrompidos
liberarían mis desconsuelos ensombrecidos.

Mas, ni la lluvia ni las rosas saben
de sutiles sentimientos
la lluvia solo moja mi pelo
y las rosa perfuman mis ensueños.

Caben más los desaciertos
desconsuelos yacen muertos
duelen más los desencuentros
que el mismo dolor
hacia los miedos.

Llévate mi alma ¡oh cielo abierto!
quiero nubes blancas en este silencio,
la vida se hace larga y ya no creo
que la golondrina que me habita
llegue a ningún puerto.

Y aunque postrero quien limpia el suelo
del sendero que recorro
se aproxime a brindarme su consuelo
ya habré muerto más de cien vidas
mil caminos recorridos y desiertos.

¡¡LOS ROSALES!! 2

domingo, 10 de enero de 2021

 


¡¡ LA SUAVE INSENSATEZ DE NUESTRAS PIELES !!

He vuelto con los vientos de montaña,
y recorro el rocío de las flores,
se humedece mi boca que te extraña,
extraña mi costado tus temblores.

He vuelto con el pelo enmarañado,
buscando en mi almohada tu regazo,
tus besos de marino enamorado,
la dulce compañía de tu abrazo.

Soy la lluvia que trae tempestades,
el viento, la tormenta, el remolino.
Apaciguas mis aguas, mis saudades
los temores que anidan mi destino.

La suave insensatez de nuestras pieles,
se llenan de pasión y de locura,
los besos que nos damos dulces mieles,
arrebatan los labios con dulzura.

 


¡¡MI CINTURA DIBUJADA EN LA COLINA!!

Celeste el agua donde se baña el amor
celeste el cielo donde los ensueños se besan
con besos que se abrazan, se encadenan
con desesperación.

Celeste la lluvia que moja la mirada
y se enamoran los ojos desde la tierra al sol.
Tengo el alma enamorada y soy la azucena
blanca cuando la mañana me canta
que vivo en el amor.

Tengo mis huesos en la cárcel de mi cuerpo
y mi sangre corre como un torrente
dejando en su cauce las flores enlazada
como corolas del tiempo,
mientras mi cuerpo de mujer,
dibuja su cintura en las colinas
y naufraga silenciosa.

 


¡OH! NOCHE NEGRA!!

Quiero morir de pena
dejar que el viento lleve mi amargura.
Dolor que me condena,
dolor que me tortura,
en esta llaga negra que no cura.

Me quedé en tu mirada.
Cansada y triste quise conmoverte,
hallarme más calmada,
pero falló mi suerte,
luchando cuerpo a cuerpo con la muerte.

Mi pluma abandonada
se yergue ante la espesa noche oscura
y escribo desolada
calmando mi locura
¡oh! noche negra , noche que perdura.