¡¡PORQUE AÚN SIGO ESTANDO ENTERERA!!

Mi ladera hoy luce, una chalina de nubes

que como neblina,  la rodea,

es otros aspecto del paisaje

pero eso no la cambia,

 ni por dentro ni por fuera,

sigue siendo la misma montaña

de tierra fértil, de musgos  y de piedras.

Aún no he logrado profundizar el sueño

mi corazón late fuerte

como si fuera a romperse,

tal vez como el junco del río

me doble en la rivera,

pero aún  así, sigo entera

no me cambia ni me altera,

no me asusta lo incierto

y lo desconocido me tienta.

No, nada va a cambiar

mi parte luminosa

de mujer abundante

que entreteje sus ilusiones

que como las olas del mar

remonta su olas en la rompiente,

y llega con su espuma

a la playas vistiendo las arenas.

Aunque  explote mi corazón,

aunque me ronde la Hidra de Lerna

nada va a cambiar lo que soy

porque nadie mueve a la montaña

y nada va a romperse en mi interior

porque aún sigo estando entera.

¡EL TODO EN MI ALMOHADA!!

En esta paz infinita de mi alma

donde encuentro un todo que apasiona

reviso mis renglones de esperanzas

y recibo de mi conciencia y experiencia

que la vida es un todo y también es nada.

Un todo que es camino recorrido

un todo de eternas fantasías

envolvente entre ensueños que florecen

y en mi nada que es el todo en mi almohada.

Hoy tengo más que nunca las caricias

de la tierra humedecida con raíces

que se extiende en lo  profundo

 de un paisaje de verdes generosos

que pueblan mi mirada de la nada

hoy tengo en la insomnia que desvela

la luna con todas las estrellas

entrando en mi ventana que revela

que hay un cielo eterno de emociones

de guirnalda de flores  y praderas

que nacen porque si,

de la más profunda nada.

Me siento tan llena de esperanzas

tan llena de de palabras que agradecen

el paisaje que agiganta mi mirada

entregada, enamorada y desprendida

en mis letras que hoy desgrana

el perfume soberbio en mis montañas.

¡¡TUS BESOS DE MARINO ENAMORADO!!

He vuelto con los vientos de montaña
y recorro el rocío de las flores
se humedece mi boca que te extraña
sensaciones  que tengo en mis albores.

 He vuelto con el pelo alborotado
buscando en mi almohada lo que dejas
tus besos de marino enamorado
tu abrazo en el que anido como abejas

En los panales, mieles de tu boca
tus versos que recorro, mi elegía
palabras que al final  me ponen loca
tus  versos me provocan alegría.

¡¡ TE QUIERO ENTRE CORALES Y MAREAS!!

¡¡TE QUIERO ENTRE CORALES Y MAREAS!!

Te quiero entre corales y mareas.
Te quiero en el silencio y la tristeza
entre palomas blancas que deseas,
entre mi tierra oscura y su simpleza.

Semejante a los mares y desiertos
sellamos nuestro amor el que condena,
con ojos que temblando y ya despiertos
se posan misteriosos en mi pena.

Te quiero en el cristal de mi ventana,
en la copa de un vino yo te quiero
llena de sol y viento en la mañana,
para decirte amor, ¡Por ti me muero!.

¡¡YO YA TE AMABA!!

¡¡YO YA TE AMABA!!

En mi niñez de flequillos en la frente

de moños en los vestidos de Domingo.

Yo ya te amaba.

Después llegaron mis seis años,

sentada en un opresor pupitre

dibujaba corazones en las tapas

de mis cuadernos con borrones.

Yo ya te amaba.

Y en los recreos, siempre con un palito seco

remarcando las paredes del patio,

escondiendo la tímida mirada

Yo te amaba.

Yo ya te amaba.

Estabas en mi cuaderno de tapas rojas,

era mi diario de la infancia,

esa que te soñaba

esa infancia recordada.

Porque yo ya te amaba.

Después, lentamente mi figura se insinuaba,

la delgadez de la adolescencia,

los pies desnudos sobre la gramilla

y un latido tierno se asomaba

entre mis labios despintados.

Porque yo ya te amaba.

Presentía tu existencia,

no estaba para mi bien claro

pero eso no importaba

porque a tu rostro delgado

yo dibujaba.

Es que yo ya te amaba.

Empecé a mirar en mis paseos

 buscado tu cara

tus manos y tus dedos

de guitarra

porque yo ya te amaba.

Me quedé muy quieta por dentro.

Me pasó la vida entera,

todos los paisajes de mujer

todos los tiempos me pasaron

y no encontré jamás tu mirada.

Aún así yo ya te amaba.

Como se ama una sola vez en la vida,

como se ama en los sueños a las hadas,

los besos fueron monedas para una fuente

de cristal, de oro y de marfil

como tu perfil donde  desmayas

tu almendrado mirar.

 Porque amor, aunque tu no lo creas

yo ya te amaba.

¡¡INSENSATEZ!! II

Me quemaste en tu fuego lentamente
y fue la insensatez, fatal entrega,
de mi alma enamorada y floreciente,
buscando entre mis manos de labriega,

tu morada de tierra permanente.
creí con inocencia estando ciega
que te amé más allá de lo elocuente
con mi alma ilusionada que hoy te niega.

Será que ya no encuentro en tu mirada
el rocío mojando mis sentidos.
No quiero tu mirar donde no hay nada.

Será entonces la tarde deshojada
el árbol marchitado y sin latidos
final de esta canción desesperada.

¡¡LO QUE TENGO Y NECESITO!!

Luego de estar un tiempo

entre los árboles verdosos

entre las flores fucsias

las laderas de color musgo.

Luego que quedarme horas bajo el sol

quemándome la miel

bañándome a cada rato

nadando en aguas tranquilas

aguas de montañas.

Necesito de las olas del mar

estar de mañana, en la tarde

y en el anochecer

hacer fogatas con mis hijos

o simplemente mirar la espuma.

Hay veces que solo me quedo

en un silencio profundo

no hay nada que recuerde

nada está en  mi mente

en  esos momentos

Siento que una presencia me envuelve

tal  vez el viento, o la suave brisa

y me recuesto en la arena

cerrando mis ojos

y solo estoy allí, con mi paz y serena.-