¡¡ ELCIELO DE MI BESO ES TU QUIMERA!!
Se enredan en tu muro y tu almohada,
mis rosas, mi jardín, tu primavera,
el cielo de mi beso es tu quimera,
quimera con mi boca enamorada.

Me pueblan los aromas de las flores,
se cuelgan y perfuman la baranda,
y los balcones huelen a lavanda,
en campos que coronan mis albores.

Te quiero entre maizales, nuestro lecho
sembrada con semillas como el trigo,
en la tierra de tu alma estoy contigo,
entregada a las fuerzas de tu pecho,

en este abril de luna en mi morada.
Son luces que ilumina la hermosura
llevándote mi cuerpo a la aventura,
con este abril de luna en tu mirada.

 ¡¡LA BELLEZA!!

Quisiera ser el prado y su frescura,
la luna que acompaña a las estrellas,​

la noche que embellece siendo oscura,​

sintiendo aquí en el alma mil centellas.

Se lucen con las lluvias mis rosales,
y se inundan mis ojos de belleza,​

las flores me iluminan celestiales,​

mostrando lo sutil en la simpleza.
​

El árbol desparrama deshojado,​

la savia que se nutre del paisaje,​

y sueño con un cielo despejado​

bebiendo de las uvas su brebaje.

La magia, los milagros en el viento,
tormenta que asustada se despeja​

el poema que en mi alma es alimento,​

la dulce flor besada por la abeja.

¡¡MI TEMPESTAD OCURA!!

. El musgo de mi cerro se quedó en tu mirada
gimiendo mis latidos de pasión y locura,
porque fuiste mi canto, mi tempestad oscura,
yo guardo mis temblores para la madrugada.

Llegaste peregrino por fin a mi morada,
la mirada perdida en mi pupila impura,
me enredé entre tus brazos, tu cinto en mi cintura,
tu tiempo entrelazado a mi alma enamorada.

Cien promesas azules nadaron a tu vera,
navegando las olas de un río voluptuoso.
Como corolas rojas te forjé en primavera.

Llegaste deshojando palabras a mi hoguera
las mías que trenzadas no encontraron reposo,
desojaste jazmines blancos en mi ladera.

 

¡¡VEN, BESAME!!

 

El beso de tu boca me cautiva
empuja a mi ansiedad a la locura
quitándome la sed y la amargura
un beso que me quema, ¡ llama viva!.

Tu boca enamorada es adictiva
pulsión en el afán mi noche oscura
mi loca sensación de miel, dulzura
mi boca enamorada es abrasiva.

Ven, bésame con besos condenables
con besos desangrados y de anhelos.
Ven, bésame con besos adorables,

que yo te besaré desde los cielos
con besos de canela, ingobernables
y tú me besarás en tus desvelos.

 

 

 

 

Ya no soy la paloma de tu nido

 

Faroles no me alumbran en la arena
madreselva esculpida entre mi pecho
se trepa por el cuerpo, me envenena
y vivo con espinas en mi lecho.

Me gusta ser la roja enredadera
envuelta en los aromas de los prados
resurjo como pálpito a tu vera
soy pájaro de vuelos enlazados.

En la cascada verde del olvido
y en medio de mis ramas coloridas
ya no soy la paloma de tu nido
soy del árbol sus hojas florecidas.

¡¡QUIERO QUE TU PRESENCIA ME ILUMINE !!

 

 Quiero librar tu imagen de la erosión del tiempo,

y guardar tu tacto inmune en mi memoria,
quiero de tu perfil, la sombra de tu invierno,
llevar tu latido de musgo por mis venas,
en este verano que soy cuando te tengo.

Quiero enraizarme en tu tierra
en las calladas tardes donde muero,
porque tu boca tiene orgásmicos venenos,
porque tus ojos miran alquimias insondables,
quiero la llaga negra de tu pelo.

Quiero que tu presencia me ilumine
y de tus pupilas su paisaje quiero
por las cavernas hondas de mi cuerpo.

 

¡¡ABRIL PISO LA ARENA CON SU FLORES!!

 

Abril pisó la arena con sus flores

llevándome a los sueños olvidados,

recuerdos en mi mente bien guardados.

Abril cubrió de rosas mis amores.

 

Yo tengo para darte mis jardines

colmados de gardenias aromadas

 son flores que perfuman alboradas,

destilando su aroma cual jazmines.

 

Yo vivo enamorada de la vida

por eso te regalo  ruiseñores

son pájaros trenzados de colores

cantando en tu ventana florecida.

 

¡¡MIRADAS!!

 

Mirada que se funde en tu mirar
la tuya en mi pupila el complemento
tus ojos que acarician mi contento
dos soles que se bañan en el mar.

Mirada que se pierde para amar
que al besarte es quedarse sin aliento
vivir como en los sueños el momento
amarse hasta morir y sin pensar.

Será que te reinvento en mi cordura
perdida con mi musa en un pincel
y pinto tu mirada con ternura.

El rojo de tus labios un clavel
mirada de avellana en mi locura
dibujo tu mirada en un papel.
​