miércoles, 30 de marzo de 2022
¡¡YO YA TE AMABA!!
de moños en los vestidos de domingo.
Yo ya te amaba.
Después llegaron mis seis años,
sentada en un pupitre te esperaba.
Dibujaba corazones en las tapas
de mis cuadernos con borrones.
Yo ya te amaba.
Y en los recreos, siempre con un palito seco
remarcando las paredes del patio,
escondiendo la tímida mirada
Yo te amaba cariño.
Yo ya te amaba.
Estabas en mi cuaderno de tapas rojas,
era mi diario de la infancia,
esa que te soñaba
esa infancia recordada.
Porque yo ya te amaba.
Después, tímidamente mi figura se insinuaba,
la delgadez de la adolescencia,
los pies desnudos sobre la gramilla
y un latido tierno se asomaba
entre mis labios despintados.
Porque yo ya te amaba.
Presentía tu existencia.
No estaba para mi muy claro
pero eso no importaba
porque a tu rostro yo dibujaba.
Es que yo ya te amaba.
Empecé a mirar en mis paseos
buscado tu cara, tu mirada
tus manos y tus dedos
porque yo ya te amaba.
Me quedé muy quieta por dentro.
Me pasó la vida entera,
todos los paisajes de mujer
todos los tiempos me pasaron
y no encontré jamás tu mirada.
Aún así yo ya te amaba.
Como aman las infinitas almas
como se ama en los sueños a las hadas,
los besos fueron monedas para una fuente
de cristal, de oro y de marfil
como tu perfil donde desmayabas
tus ojos calmados de mar.
Pero un día te encontré
en el andén de la vida
en el vaivén de las palomas
en el Edén de las almas
que se fusionan al amar.
Porque aunque tú no lo creas
¡TÚ Y YO!!
Hay un mar que siembra distancia
pero es el mismo que nos acerca,
así mismo está intacta mi inocencia
si conmigo sigue intacta tu presencia.
La niña de moños en el vestido,
de pelo largo a la cintura,
mientras jugábamos traviesos
a la rayuela en mi vereda.
Una vez tú y yo fuimos
descubridores sorprendidos,
de un mundo desconocido
Y entonces, en el ayer,
creíamos conocer.
Pero no es así.
Ni yo sé quién eres tú
ni tú me conoces a mí,
porque somos dos niños aún.
Yo todavía por recorrerte
para a ti comprenderte,
y tú lleno de incertidumbres
para llegar a entenderme.
Hoy sé que esa niña vive en mí
Con todo por conocer
Y presiento que hay un niño en ti
Con todo por aprender.
viernes, 25 de marzo de 2022
¡¡POESÍA,POETA Y PROCEDENCIA!! (a Miguel Hernández)
¡¡Poesía, poeta y procedencia!!.
No cesará ese rayo del guerrero,
guerrero que no
cesa ni marchita,
eterno corazón el
que palpita
de ser pastor
poeta, fue el primero.
No se agota la
barca ni el velero,
liberadora fuerza
que te habita.
Rocío de montañas
que palpita
como barca que
busca su sendero.
Obstinada
insistencia que libera,
no se agota y agita
tu insistencia
la lucha que
persigue tu quimera.
Ejercita la voz, la
persistencia,
los versos con su
aliento lisonjera.
¡¡Poesía, poeta y
procedencia!!.
¡¡ ENTRE LOS SINSBORES DE MI VIDA!!
Estoy entre tu cielo y mi locura,
entre los sinsabores de mi vida.
Pero ¿Qué puedo hacer si mí alma olvida?
Olvida trastornando mi cordura.
Yo veo que la noche luce oscura,
olvido que dormimos enlazados
momentos, que vivimos entregados,
donde amaste la piel de mi cintura.
Yo quisiera tu boca delincuente,
tu mirada que luce desvelada,
amarte con tristeza en la alborada
y encontrar tu mirar irreverente.
En mi mundo oscurece sin remedio,
temblores de mi cuerpo que transido
me ciega, me enfurece y encendido,
se apaga en la tormenta sin tu asedio.
jueves, 24 de marzo de 2022
¡¡UN MAR ENTRE TUS MANOS!!
martes, 15 de marzo de 2022
¡¡PAJAROS EN TU
PUERTO !!
Aquí te amo
queriendo pájaros en tu puerto
motivando el
momento del deseo anhelado
que mueve a mi
contento de amor desesperado
amanecer de
encuentro de tu mirar despierto
Aquí te amo
esperando el aroma de mi huerto
Donde juega el
hechizo de un beso enamorado
De volver
agradecida al abrazo anhelado
De seguir siendo el
fuego en un silencio muerto.
La brisa vespertina
la niebla de los pinos
Acompañan mis
versos canciones del oriente
Que besan el
paisaje mi canto el de los trinos
Los prado que
embriagados dibujan el poniente
Resulta que es la
tarde de un brebaje de vinos
Resulta que te
quiero con mi calor ardiente.
lunes, 14 de marzo de 2022
¡¡HOY A MUERTO LA POESÍA!!
Hoy a muerto la poesía.
Han muerto las palabras
en las playas vacías,
ha muerto la poesía
porque son melancólicas
alas de palomas perdidas.
Yo que entregué mi alma
en versos enamorados,
yo que entregué mi vida
mi tierra, mis siestas,
para escribir en un un papel
o en la pared de mi muro blanco
sin colores ni armonía,
siento que el mundo se derrumba,
que el viento se lleva las flores
en las olas de un mar salado y frío.
Un mar que dasafía, y ahonda mi pena,
en un cielo sin estrellas y sin luna.
Déjame decirte a ti, amada poesía,
mi alma está de luto
porque han muerto palabras dulces
llenas de pasión de alegrías,
donde no figura ni mi nombre ni el tuyo,
donde crece el amargo yuyo
en el huerto ya vacío y marchito.
¡¡Hoy a muerto la poesía!!
¡¡MARIPOSAS PERDIDAS!!
Cuando la luces temblorosas de las estrellas
exhalen el suspiro de las golondrinas
mandadame un beso sobre sus alas.
Y en los horizontes del oriente
cuando sople el viento sobre el mar las olas
dejame caricia sobre mis nubes rosas.
Y este corazón roto con su canto triste
amarrará mis manos a la brisa,
para encontrar una marea verde confundida.
Mientras los vientos azoten
las amapolas ardientes y rojas
las dejaré volar como mariposas
solitarias y perdidas.
¡¡LLUVIA SOBRE MIS NARDOS!!
La tarde está nublada
y se aproxima una nube negra
y mi alma de poeta
se despierta.
Parece que nevara
y es una simple niebla.
Se desata una mansa lluvia
sobre la esperanza de las piedras
entre las rosas blanca
va mojando los recuerdos
como a el alma de las rosas.
¡También sobre el alma llueve
mojando mi tristeza!
La lluvia del alma tiene
una blanca pena
como las rosas blancas
blancas como mi pena.
Irrigas en silencio el paisaje,
eres como una mano amable
que derrama vida sobre las flores.
A veces te aproxima sobre mis nardos
que huelen a jazmines,
y lloras sobre su pétalos
y lloras en mis rosales.
Mojas las hojas caídas
y parece que revivieran,
la tierra despide su aroma
y te respiro
entre la triste calma del viento
y la cadencia de tus gotas.
Canta la tierra,
cuando te conviertes
en una suave llovizna
cálida como mis lágrimas.
Sale el sol,
y aparece la azul primavera,
el prado brilla luminoso y húmedo,
como la lluvia sobre mis nardos.